miércoles, 5 de mayo de 2010

El Sujeto Docente y Compromiso Socio-Político en Venezuela


En la sociedad actual resulta bastante fácil para las personas acceder en cada momento a la información que requieren a diferencia de lo que ocurría hace un siglo. No obstante, y también a diferencia de lo que ocurría antes, ahora la sociedad está sometida a cambios acelerados, que plantean continuamente nuevas problemáticas, exigiendo a las personas diferentes capacidades como, iniciativa, creatividad, uso de herramientas TIC, estrategias de resolución de problemas, trabajo en equipo y otras. para crear el conocimiento preciso que les permita afrontarlas con éxito.

Por ello, hoy en día el papel de los formadores no es tanto "enseñar" conocimientos que tendrán una vigencia limitada, desactualizados o sin la visión dar aportes relacionados a su contexto. Es por eso, que el docente de hoy debe ayudar a los estudiantes a "aprender a aprender" de manera independiente en esta cultura del cambio y promover su desarrollo cognitivo y personal mediante actividades críticas y aplicativas que, aprovechando la inmensa información disponible y las potentes herramientas TIC, tengan en cuenta la formación centrada en el alumno y les exijan un procesamiento activo e interdisciplinario de la información para que construyan su propio conocimiento y no se limiten a realizar una simple recepción pasiva de solo memorización de la información.

En relación a esto, el sistema educativo ha realizado ciertas reformas, estableciendo discusiones sobre la función del docente en aula, la cual se encuentra vinculada a la ética, la religión, la cultura, los valores y el uso de las nuevas tecnologías. Por tal motivo, el estado venezolano realiza a nivel nacional jornadas, talleres y cursos donde cada uno de los docentes asuman esta visión de cambio, orientada a la necesidad de actualización del sistema y de sus actores.

El sujeto docente en formación se constituye desde una perspectiva integral, a partir de los siguientes rasgos:

∗ Capacidad de contextualización.

∗ Relaciona el ser con el conocer, teniendo como mediador el proceso de

concientización.

∗ Se forma tomando como base de su enseñanza y aprendizaje, la investigación, la convivencia y el ejercicio crítico del pensamiento.

∗ Interpreta su propio mundo de vida y reconoce las implicaciones y compromisos éticos, políticos y estéticos subyacentes.

∗ Despliega creativamente la potencialidad de su ser–hacer–pensar– pedagógico. Por lo tanto, potencia su ejercicio intelectual y su papel como trabajador de la cultura en su más amplia expresión.

En general, un sujeto docente en formación reclama un abordaje ético-filosófico para pulsar el sentido de la libertad, el compromiso, la responsabilidad, la honestidad, la solidaridad y el ejercicio de la ciudadanía. Esta condición ética no se constituye de manera prescriptiva, sino a partir de las propias prácticas de vida que docentes y alumnos despliegan en su quehacer pedagógico, de allí que el docente no debe estancarse en una sola vía para ejercer su profesión debe buscar otros caminos en la exploración de sus capacidades, las maestrías, diplomados y otros estudios de nivel deben encaminar a este sujeto docente al dominio de sus fortalezas, las del entorno y las de la sociedad con la que interactúa y así atar esos cabos sueltos de la educación creando una unión inseparable de verdades que transformen a los nuevos pensadores…

lunes, 26 de abril de 2010

ANÁLISIS CRÍTICO: LOS 7 SABERES NECESARIOS PARA LA EDUCACIÓN DEL FUTURO & INTRODUCCIÓN AL PENSAMIENTO COMPLEJO DE ÉDGAR MORÍN

La educación en la actualidad presenta grandes barreras para avanzar. Una de ellas es la resistencia de los actores principales como los docentes al cambio, otra es la falta de políticas educativas eficientes que incorporen herramientas adaptadas a las realidades cognoscitivas y tecnológicas de nuestros días. Y por más esfuerzos que realice una minoría de personas interesadas y motivadas al cambio es necesario la integración de todos para que prosperen de verdad esos cambios positivos para la educación.

De igual manera, la educación del futuro debe considerar saberes que normalmente son ignorados en los planes de estudios de hoy, por eso se debe contar con actualizaciones necesarias en las propuestas curriculares que se realizan para los tiempos venideros.

Es aquí donde entra en consideración lo expuesto por Edgar Morín en su libro los 7 Saberes Necesarios para la Educación del Futuro, dicho autor da a entender que debemos abrirnos a nuevas ideas, a nuevos pensamientos y a nuevas estrategias para impartir el conocimiento, en conjunto; y no aferrarnos a creer ciegamente en las ideas ya aceptadas y comprobadas desde años anteriores.

En el primer saber del libro ya mencionado (Las cegueras del Conocimiento: el Error y la Ilusión), expresa el autor que “la realidad y su conocimiento sufren una reconstrucción continua a medida que nuestras ideas evolucionan”, es por eso no podemos quedarnos por lo dicho y estudiados por otros hace ya varios años, la realidad en conjunto con las ideas de las personas van cambiando cada día, lo que induce a que la educación vaya adaptándose a estos cambios replanteando cada día la labor docente, la gestión de la educación y los procesos de enseñanza-aprendizaje.

En su libro Introducción al Pensamiento complejo, Morín nos dice: “No olvides que la realidad es cambiante, no olvides que lo nuevo puede surgir y, de todos modos, va a surgir”, esto enlaza con lo expuesto anteriormente de la realidad cambiante, y confirma que por más resistencia al cambio de las personas enfrascadas a lo tradicional tendrán que ceder un poco su forma de pensar y trabajar o permitir que la generación de relevo tome las riendas de los nuevos estudiantes, los cuales ya están siempre un paso por delante en la era tecnológica por su interacción constante, sea por diversión o por el movimiento social que obliga día a día al uso de teléfonos de avanzada y el uso constante del Internet. Este simple hecho prepara inconscientemente a esta “Generación Z”, así llamada por Herald Sun (2008), a la adaptación a estas nuevas estrategias y herramientas necesarias para involucrarse con la educación escolar y social de estos tiempos.

En el segundo saber del libro los 7 Saberes (Los Principio del conocimiento Pertinente), resalta la misión que tenemos en lograr desarrollar la inteligencia general para resolver problemas usando el conocimiento de una manera multidimensional tomando en cuenta la complejidad. Morín en el Pensamiento complejo hace conocer que este tipo de pensamiento no resuelve en si mismo los problemas pero constituye una ayuda para las estrategias que si lo harán. Lo simple resuelve problemas simples y en la educación no hay nada de simplicidad, sobre todo en Venezuela que tras décadas de cambios y adaptaciones de currículos e ideologías importadas todavía hay un vacío en lograr verdaderas políticas que sustenten una educación adaptada a nuestras necesidades, a las nuevas tecnologías y a los cambios sociales a los cuales las nuevas generaciones deben estar preparados.

En relación a esto, el científico Albert Einstein propuso “la Teoría de la Crisis” donde dice:

"No pretendamos que las cosas cambien si seguimos haciendo lo mismo... La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis se supera a sí mismo sin quedar "superado".

Es necesario enfrentar las penurias de los momentos malos para lograr el florecimiento de ideas a esos desafíos, lo complejo es lo que ayuda a nuestro cerebro a trabajar al 100%, lo sencillo nos ocasiona pereza para salir de esos problemas y conseguir verdaderas soluciones. Según Einstein, “sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía, sin crisis no hay meritos”. Esos meritos deben ser vistos como el aporte que cada uno hace a la sociedad, a la comunidad, a la educación, por más ínfimo que sea es lo que nos impulsa a seguir adelante y conseguir poco a poco cambios más grandes, no se deben confundir esos meritos con títulos obtenidos solo para colgarlos en la pared, para el aumento de sueldo o para elevar “el estatus” dentro de una organización.

Para el tercer saber del libro los 7 Saberes (Enseñar la Condición Humana) existe la unidad humana la diversidad humana al mismo tiempo, nuestra identidad individual asociada a nuestra identidad como especie y la identidad social conforman un trinomio propio de la realidad humana. Debemos entender que nuestro destino tiene la apariencia del destino de la especie humana, del desino individual y el social complejos e inseparables, donde se concibe que tenemos un destino y una condición común como ciudadanos de la tierra. Esta aclaraciones nos hacen saber que cualquier acción que apliquemos para resolver un problema o la toma de decisión para solventar una necesidad individual se verá reflejado en otros individuos y por más que intentemos no alterar la vida de los otros ciudadanos es imposible el no hacerlo, ya que somos parte de este todo y aunque nuestra acción sea positiva o negativa será necesariamente reflejada en otros.

Asimismo, en el libro del Pensamiento complejo, Morín nos hace saber que la vida social exige que nos comportemos como maquinas triviales (cuando conocemos todas sus entradas conocemos todas sus salidas), esto habla de comportamientos predecibles, pero el ser humano por naturaleza propia es no trivial, si no consigue la solución de una manera busca otra hasta alcanzarla o fracasar en el intento. Aunque, muchos países optan por políticas triviales donde obtengan respuestas conocidas o manejables por sus ciudadanos siempre sale a la luz que el comportamiento humano individual y en conjunto no puede ser restringido.

La identidad Terrenal es el cuarto saber, formula que debemos enseñar sobre la crisis que actualmente enfrentamos alrededor de todo el mundo, producto de las acciones tomadas por las sociedades en los últimos siglos. Como de ahora en adelante todos poseemos los mismos problemas de vida o muerte y compartimos un destino común las sociedades por más remotas que estén, nos corresponde trabajar para un mismo fin con estrategias y acciones diferentes que contribuyan a no empeorar lo que ya está en deterioro. Aunque como se dice en el libro de Pensamiento Complejo “la acción es estrategia”. La palabra estrategia no designa a un programa predeterminado que baste para aplicar en el tiempo. La estrategia permite, a partir de una decisión inicial, imaginar un cierto número de escenarios para la acción, escenarios que podrán ser modificados según las informaciones que nos lleguen en el curso de la acción y según los elementos diversos que surgirán y alterarán la acción.

El quinto saber llamado “Enfrentar las incertidumbres”, trata del deber que tenemos en desarrollar un pensamiento que reconozca y enfrente la inseguridad de nuestro tiempo, que enseñe principios de estrategias que nos permitan desafiar todos los conflictos y problemas que se nos presentan a diario en diferentes entornos, asimismo, modificar este perfeccionamiento en virtud de las informaciones en el camino. Las ciencias nos han revelado muchas certezas, pero también nos han dado muchas incertidumbres, pero no se puede escapar de ellas y vivir alejado de las ciencias.

La educación del futuro debe estar encaminada a enseñar a comprender, a tolera y a valorar todo aquello que nos rodea, esos son los principios básicos del sexto saber “Enseñar la Comprensión”. En ocasiones nos sentimos el centro del universo, el que todo lo sabe y lo que no conocemos o nos parece extraño es mentira, secundario o atenta contra nuestra forma de pensar, es ahí donde cometemos el grave error de no aceptar que desconocemos algunas cosas y que no tenemos las respuestas para todo, llegamos a convertirnos en simplistas evocando el “Pensamiento complejo”, perdemos la comunicación y hasta la ética por el simple hecho de defender algo que sabemos que está mal, es de ahí la importancia que tiene reflejar este entendimiento de la comprensión para que las próximas generaciones no cometan otros tropieces.

Por último, tenemos “La Ética del Género Humano”, donde se orienta a la educación a contribuir en la toma de conciencia del cuidado de nuestro planeta y nuestra comunidad. Está conciencia se debe concebir en la voluntad de producir verdaderos cambios en la manera de pensar y actuar. La ética no se enseña con clases de moral y valores solamente hay que hacer pensar a cada persona que es humano, un individuo, pero que forma parte de una comunidad o sociedad y que en estos días llenos de complejidad debe existir un verdadero compromiso con la solidaridad.

domingo, 31 de enero de 2010

Roger Federer y su 1er GRAND SLAM del 2010

MELBOURNE -- El suizo Roger Federer derrotó al escocés Andy Murray en la final del Abierto de Australia y se consagró como campeón del torneo por cuarta vez en su carrera.
Fue un gran día en cuanto a nivel para el máximo preclasificado, que se mostró preciso, regular, agresivo y firme para romper todos los intentos tácticos de un Murray superado con claridad a lo largo del partido. El resultado final fue 6-3, 6-4 y 7-6 (13-11), tras 2 horas y 42 minutos.
Con este título, el número uno del mundo que ya había obtenido este título en 2004, 2006 y 2007, se convirtió además en el mayor ganador del torneo en la Era Abierta, con cuatro coronas aquí. También es el quinto jugador en la historia en alcanzar esa marca. Antes lo lograron Roy Emerson (6), el propio Agassi, Jack Crawford y Ken Rosewall, con cuatro.
Además, se trata del 16º título de Grand Slam para el número uno del mundo, un récord absoluto de todos los tiempos. Y el primero desde que es padre de mellizas.
Sólido con su servicio y excelente con los golpes de fondo, Roger resquebrajó el plan de juego de Murray, que comenzó jugándole alto y al revés para ver si podía incomodarlo. Lejos de ello, el suizo victimizó a su contrincante: lo apabulló con tiros ganadores y jugó con oficio para lograr vencerlo por segunda vez en una final de Grand Slam (ya lo había hecho en el US Open 2008).
Nada pudo hacer Murray, que no jugó un mal partido pero estuvo demasiado pasivo, especulando con errores que nunca llegaron, y que sigue sin ganar su primera corona en un torneo grande.